En el primer nivel asistencial, los eventos adversos asociados a fármacos son poco frecuentes pero hasta un 70% son evitables

Baja el número de agresiones que sufren los médicos

• No actuar para minimizar los eventos adversos puede tener consecuencias jurídicas muy negativas para los profesionales e instituciones sanitarias

• Los profesionales de la sanidad pública, en contraposición con los de la sanidad privada, gozan de mayor protección penal frente a los actos de violencia

Bilbao, 11 de octubre.- En el año 2011 se registraron 493 casos de agresiones a médicos, en el año 2012 un total de 416 casos y a lo largo del 2013 se contabilizaron un total de 354, según los índices del Observatorio Nacional de Agresiones de la Organización Médica Colegial. “Existe una tendencia a la baja en este tipo de desafortunados episodios, poniendo de relieve que recurrir a la violencia, tanto física como verbal, no es el medio para solucionar un problema dentro del ámbito asistencial”, destaca Igor Pinedo García, abogado de ASJUSA LETRAMED que ha participado en una mesa sobre “La seguridad en Atención Primaria: de los pacientes y de los profesionales”, celebrada en el 36º Congreso Nacional de SEMERGEN.

Entre las principales causas que están en el origen de estas agresiones, el responsable de ASJUSA PHARMA y ASJUSA DATA revela que “han aumentado considerablemente las causas por no emitir informes médicos acordes con las exigencias del paciente (11%) y por petición de bajas laborales (7%)”.

Para reducir el riesgo de agresiones, los expertos aconsejan la implementación paulatina por parte de las administraciones públicas de campañas de información sobre cómo funciona y hasta donde abarca, o puede abarcar, el Sistema Nacional de Salud y los recursos de los que dispone. También se apunta a la necesidad de informar a los usuarios que no son únicamente sujetos de derechos, sino también de obligaciones para con el sistema y sus profesionales. La formación de los profesionales sanitarios en la gestión del conflicto es otra de las medidas que se recomienda implantar; “formación a los sanitarios para poder instruir debidamente a los pacientes en situación de estrés, inconformismo, ansiedad..., todos ellos, estadios previos a la consumación de un episodio violento”, afirma el abogado Igor Pinedo.

Distintas repercusiones legales

Tanto los intentos de agresión a los profesionales de la sanidad pública, como las agresiones consumadas, pueden suponer una pena de 1 a 3 años de prisión para sus autores (Art. 551.2 Código Penal). En la actualidad, este tipo de agresiones, o su intento (acometimiento), está calificado como Delito de Atentado contra Funcionario Público, una calificación penal que es indiferente del régimen laboral que el profesional tenga con la sanidad pública.

Sin embargo, se advierten importantes diferencias legales según si el profesional trabaja en la pública o la privada. “Los profesionales de la sanidad pública, en contraposición con los de la sanidad privada, gozan de mayor protección penal frente a los actos de violencia que sufran durante el ejercicio de sus funciones”, subraya el representante de ASJUSA LETRAMED.

El Derecho para gestionar el riesgo

En cualquier caso, como declara Javier Moreno Alemán, Presidente Ejecutivo de ASJUSA LETRAMED, “el Derecho puede ser una herramienta útil en la gestión del riesgo médico”. No en vano, ha permitido el reconocimiento del derecho a una asistencia sanitaria de calidad y segura, ha favorecido la disminución de la variabilidad clínica, ha articulado sistemas de notificación de eventos adversos y ha promovido la cultura de la seguridad del paciente. Además, aclara el abogado Javier Moreno, “no actuar para minimizar los eventos adversos puede tener consecuencias jurídicas muy negativas para los profesionales e instituciones, incrementando el fenómeno de la judicializacion de la Medicina”.

Menos riesgos, pero evitables

Los estudios realizados a nivel mundial y nacional revelan que en la asistencia sanitaria se producen muchos eventos adversos que provocan lesiones, secuelas e incluso fallecimientos, muchos de los cuales son evitables si se implantan las estrategias adecuadas de seguridad del paciente.

El estudio APEAS, sobre la seguridad de los pacientes en Atención Primaria (Ministerio de Sanidad, 2008), pone de manifiesto que pese a la alta frecuentación de pacientes atendidos en el primer nivel asistencial, los eventos adversos son poco frecuentes (10,11x1000 casos -971 casos sobre 96.047 pacientes atendidos-, frente al 9,3% de eventos adversos ligados a la hospitalización), pero el 70% de esos eventos adversos en AP eran evitables; por tanto, afirma Javier Moreno, “las instituciones y los profesionales tienen en su mano evitar la mayoría de los eventos adversos, relacionados sobre todo con problemas en la comunicación (24,6%) y con errores de medicación (48,2%) y, con ello, minimizar los costes directos e indirectos de estos eventos adversos”.

Acerca de SEMERGEN

La Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria, SEMERGEN, es la sociedad científica pionera de la Atención Primaria en España, con más de 40 años de experiencia. Se estableció con el objetivo fundamental de promocionar la Medicina de Familia, mediante el mantenimiento y mejora de la competencia profesional de los médicos, fomentando la investigación y facilitando la formación continuada del médico con el fin de mantener la calidad en el cuidado de la salud de los ciudadanos. Dispone de 17 delegaciones autonómicas y celebra elecciones democráticas cada 4 años. En 1999 se creó la Fundación SEMERGEN. El 37.º Congreso Nacional tendrá lugar en Valencia, del 13 al 17 de octubre de 2015. Para más información: www.semergen.es.

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Responsable de prensa y comunicación de SEMERGEN
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